Ayer iba a cortarme
el pelo, pero mi peluquero está en una zona fresona. Yo estaba con ropa vieja y me iba a arreglar para ir a cortarme el cabello, pero de repente se
me hizo bastante pendejo arreglarme para ir a la peluquería, pues yo soy el
cliente, el que paga, además a eso iba, a que me arreglaran. Me pregunté por
qué tendría que avergonzarme por parecer pobre.
En la noche puse un momento la
tv y en el canal de la unam estaba una miniserie sobre la vida de Dostoievski. En
una parte su hijo le pide dinero, porque sus cuates tienen para gastar en las
tabernas y él no, Dosto anda en chinga escribiendo El jugador porque si no la termina en un mes va a trabajar de a
gratis para un editor culero por nueve años, el chavo insiste en que le dé
dinero, le grita que se avergüenza de ser pobre, su padre le contesta “avergüénzate
de ser estúpido, no de ser pobre”.
1 comentario:
Un excelente padre, sin duda.
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